Pero mientras tanto, voy a comentar como ha sido esta entrada en el comenzado curso. Nos recibieron en el SUM, esa sala donde sus cuatro paredes seran testigos de todos los examenes que haremos en el curso, de chuletas, cambiazos y de bolis gastados. Nos hablaron de lo mucho que nos costaría, que no por díficil sino por estresante. Os puedo decir que ya lo estoy sufriendo y llevo sólo un mes en un infierno de apuntes, fichas y comentarios de texto. También eso de que nos teníamos que poner las pilas nada más entrar, tampoco se equivocaron, la primera vez en la historia del instituto que cuenta la prueba inicial. Entre todo esto, tenemos que atender en clase como nunca, aunque no quedarse dormido es un logro, entre esas clases tan amenas de Historia o donde Arantxa te explica minuciosamente la vida de cada filósofo. Pero no se me puede olvidar lo que nos queda, y es vivir los fines de semanas, perdon, tener vida social. En mayo se me habrá olvidado que es salir o que es una botellona o una tardeá, o peor, que son los amigos, que quieras que no tienes los colegas del instituto, que más que colegas se convierten en amigos de penas o contactos de Whatsapp con los que compartir soluciones. Acabando puedo decir, que sólo quedan 2 meses para Navidades, no es verano, no está libre de examenes ni trabajos, pero por lo menos no hay que levantarse a las 7, ni aguantar 6 horas de clase y lo más importante, están esos 4 días míticos de Navidad en los cuáles puedes pillar cogorza y está justificado. Buenas Noches y Bienvenidos a Confidencias de Chicas.
Pd: En Mayo contaré lo mismo pero ya vivido en propias carnes.
María.
No hay comentarios:
Publicar un comentario